miércoles, 27 de abril de 2016

El Plan Perfecto. Romanos 10



Para conseguir un propósito en la vida se necesita mucho más que tan solo querer lograrlo se necesita diseñar un Plan de acción.
Tener un  propósito es saber qué es lo que quiero conseguir pero tener un plan es saber cómo lo voy a conseguir.
Si tú eres de los que todos los años el 31 de diciembre te la pasas escribiendo buenos propósitos pero pasa el año y sientes que nada ocurre y que no consigues lo que quieres muy posiblemente la falla este en que no diseñas un buen plan para conseguir lo que quieres.

Para conseguir algo lo primero que se necesita es tener un propósito o saber qué es lo que  quiere. Jesús tiene un propósito muy claro.
1. Propósito: que todos seamos Salvos. 1 Timoteo 2: 4 a “el cual quiere que todos los hombres sean salvos
2. Plan. La forma para conseguirlo sería a través del Conocimiento. V 4 b “y vengan al conocimiento de la verdad.
2.1. Boca a Boca. Este sería el método para lograr el Plan. La predicación del evangelio haría que se cumpla el plan de salvación. Mateo 28: 19-20 “Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.
El problema es que pasa el tiempo y cada vez se ve más lejos el día en que la humanidad sea salva. ¿Acaso fallo el propósito y el plan de Dios? ¡No! Jesús cumplió con su parte el al morir y resucitar propicio la salvación, el problema es que nosotros los encargados de cumplir el plan hemos fallado.
Por qué no se cumple un Plan.
1. No hacemos uso de los medios. Romanos 10: 8 “Mas ¿qué dice? Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón. Esta es la palabra de fe que predicamos:” la palabra de Dios es la herramienta que nos permite llevar salvación el problema es que cada día la utilizamos menos.
2. No nos comprometemos con nuestra responsabilidad. V 14 ¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique?” lo único que la gente necesita para ser salvo es invocar el nombre de Jesús o desear que él tome posesión de nuestra vida. V 13 “porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo.” al parecer es muy fácil solo invocar el nombre de Jesús el problema es que para hacerlo se necesita que alguien lo predique.
3. Pocos obedecen. De nada sirve que algunos pocos se atrevan a evangelizar si quienes escuchan no obedecen. V 16 “Mas no todos obedecieron al evangelio; pues Isaías dice: Señor, ¿quién ha creído a nuestro anuncio?
4. Los de afuera aprovechan más que los de adentro. V 20 “E Isaías dice resueltamente: Fui hallado de los que no me buscaban; Me manifesté a los que no preguntaban por mí.” muchas veces recibimos mas respaldo de la gente extraña que de los mismo de la casa.
5. Los beneficiados del Plan no tienen interés. V 21 “Pero acerca de Israel dice: Todo el día extendí mis manos a un pueblo rebelde y contradictor.” lo más terrible es trabajar para alguien a quien no le interesa lo que hacemos. Esto causa desánimo y ganas de desistir de cualquier plan.
La única forma de hacer realidad cualquier propósito es si tenemos un plan para conseguirlo pero sobre todo si contamos con personas que estén dispuestas a luchar para conseguirlo la única forma para que las cosas salgan muy bien es si las hacemos a la manera de Cristo y no a nuestra manera.