La verdad es que todos queremos ser
unos grandes predicadores nadie se sube a una plataforma a dar su peor discurso
todos cuando nos dirigimos a una audiencia no importa cuán grande o pequeña sea
queremos hacerlo bien y en algunos casos también quieren impresionar.
Esto es natural todos de alguna
forma queremos que los demás reconozcan nuestro esfuerzo.
El sentir que las personas se gozan
con lo que hacemos o decimos en cierta forma nos estimula seguirlo haciendo.
Apolos
era un gran predicador ejemplo para quienes tenemos esta misión.
Como ser un buen Predicador.
1. Siendo Elocuente. Nuestro hablar
debe ser florido o muy Rico. La mejor forma de conseguirlo es a través de la
buena lectura. V 24 a “Llegó entonces a Éfeso un judío llamado Apolos, natural de
Alejandría.”
2. Siendo conocedor de las
escrituras en el caso espiritual o conocedor de lo que quiero mostrar en el
caso secular. V 24 b “, varón elocuente, poderoso en las Escrituras” difícilmente
puedes enseñar lo que no conoces.
3. Preparándose. V 25 a “Este había sido instruido
en el camino del Señor;” no importa cuanta experiencia puedas tener la preparación
siempre será importante. Una buena preparación nos garantiza seguridad y
sobretodo confiabilidad en lo que decimos.
4. Siendo Fervoroso. V 25 b “y siendo de espíritu
fervoroso, hablaba” debemos tener pasión por lo que hacemos. La pasión es lo
que nos da fuerzas para continuar y nuca desfallecer.
5. Enseñar con Diligencia. V 25 c “y enseñaba diligentemente
lo concerniente al Señor, aunque solamente conocía el bautismo de Juan” el mejor
maestro no es el que más sabe, el mejor maestro es el que se le facilita transmitir
lo poco o lo mucho que sabe.
6. Siempre está dispuesto para
aprender. V 26 “Y comenzó a hablar con denuedo en la sinagoga; pero cuando le
oyeron Priscila y Aquila, le tomaron aparte y le expusieron más exactamente el
camino de Dios.” las personas inteligentes son aquellas que siempre están aprendiendo,
los ignorantes son aquellos que creen que se las saben todas es por esto que se
estancan y van en retroceso.
Esdras era un escriba de mucho
conocimiento pero siempre tenía su corazón dispuesto a aprender. Esdras 7: 10 “Porque Esdras había
preparado su corazón para inquirir la ley de Jehová y para cumplirla, y para
enseñar en Israel sus estatutos y decretos.”
7. Convence con Argumentos. Un buen
maestro no impone, convence. Hechos 18: 28 “porque con gran vehemencia refutaba públicamente a los judíos,
demostrando por las Escrituras que Jesús era el Cristo.”
8. Tiene autoridad al enseñar. La
autoridad no es mandar o imponer la verdadera autoridad la da el conocimiento. Marcos
1: 22 “Y se admiraban de su doctrina; porque les enseñaba como quien tiene
autoridad, y no como los escribas.”
Un buen predicador no se ufana de
lo que sabe, un buen predicador se alegra cuando enseña. Un buen predicador no
es el que más se mueve o el que más grita, un buen predicador es el que no
tiene miedo de enseñar la verdad pero con amor.
