Uno de los deportes más recomendados
por algunos médicos es la natación.
Ellos consideran que la natación
beneficia a todo el cuerpo. Desarrolla mejor calidad de vida Tonifica los músculos,
mejora el sistema cardiovascular. Etc.
En el nivel espiritual Dios quiere
que nosotros nademos en el espíritu esto también representaría para nosotros
tener una mejor calidad de vida a nivel espiritual hay varios niveles de
contacto en el espíritu al igual que en la natación.
Entre
más avanzamos aumenta más el nivel de agua por lo tanto aumenta más el nivel de
esfuerzo.
La mayoría de las personas entramos
a la vida cristiana tan solo pensando en recibir beneficios pero sin
comprometernos.
Niveles de compromiso en el Espíritu.
1. Los Tobillos. V 3 “Y salió el varón hacia el
oriente, llevando un cordel en su mano; y midió mil codos, y me hizo pasar por
las aguas hasta los tobillos.” en este nivel solo queremos estar en algún lugar llamado
iglesia porque de alguna forma sentimos que estamos bien. Queremos estar solo
por las ramitas sin comprometernos con algo.
2. Las Rodillas. V 4 a “Midió otros mil, y me hizo pasar por las aguas hasta las rodillas.” cuando
tenemos que caminar con el agua a las rodillas ya el avanzar es más difícil
pero también nuestra condición física va mejorando. Poco a poco vamos
comprometiéndonos.
3. Los Lomos V 4 b “Midió luego otros mil, y me
hizo pasar por las aguas hasta los lomos.” ya no es tan solo salpicarnos de
agua ahora crece nuestro nivel de compromiso nos sentimos útiles y dejamos de
ser simples espectadores. Caminar estando con el agua a la cintura forrase nuestras
piernas nos hace más veloces en lo que hacemos.
4. Nadando. V 5 “Midió otros mil, y era ya
un río que yo no podía pasar, porque las aguas habían crecido de manera que el
río no se podía pasar sino a nado.” nuestro nivel de compromiso es
total y ya no sentimos la misma presión y cansancio que sintamos en los niveles
anteriores. Ahora reposamos en el espíritu y toda la carga la lleva Cristo.
La natación hace que se ejerciten
todos los músculos del cuerpo. El nadar en el espíritu significa más esfuerzo y
poner en práctica todos nuestros dones. Una persona que nada en el espíritu es
aquella que: discípula, evangeliza, estudia la palabra de Dios, se congrega de
manera constante. Etc.
Solo cuando aprendemos a nadar en
el espíritu es cuando recibimos verdadera sanidad y prosperidad para nuestro
ser. V 9 “Y toda alma viviente que nadare por dondequiera que entraren estos
dos ríos, vivirá; y habrá muchísimos peces por haber entrado allá estas aguas,
y recibirán sanidad; y vivirá todo lo que entrare en este río.”
La sanidad y la prosperidad en el
espíritu son mucho más que un simple milagro supliendo alguna necesidad en el
cuerpo o de manera material.
Características de una verdadera sanidad en el espíritu.
1. Paz en medio de la tormenta. La paz
que produce el espíritu de Dios es algo indescriptible es algo que no se puede entender.
Solo se siente. Filipenses 4: 7 “Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará
vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.”
2. Se experimenta alegría constante
aun en medio de las dificultades. Proverbios 15: 13 “El corazón alegre hermosea
el rostro; Mas por el dolor del corazón el espíritu se abate.”
3. Capacidad de llevar bienestar a
otros no importa las circunstancias que esté viviendo. 2 Corintios 6: 10 “como entristecidos, mas
siempre gozosos; como pobres, más enriqueciendo a muchos; como no teniendo
nada, más poseyéndolo todo.”
4. Se experimenta gozo en cualquier
situación. Filipenses 4: 12 “Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo
estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener
abundancia como para padecer necesidad.”
Hay muchos templos y estadios
llenos de personas que buscan un milagro pero también muchas iglesias vacías
cuando se trata de comprometerse con Jesucristo.
Jesucristo no quiere que estés por
las ramitas él quiere que dispongas tu corazón para comprometerte con la obra
salvadora de Cristo.