La vida de éxito de una
persona se basa en la toma de decisiones, el carácter se define de acuerdo a la
capacidad que tengamos de tomar decisiones en la vida.
Hay decisiones que pueden
determinar la vida o la muerte. Y es necesario que las hagamos con mucha
sabiduría.
Hay muchas razones que nos
motivan a tomar decisiones: el conocimiento, el miedo, el orgullo o el exceso
de confianza.
¿Cuál
de estas razones te motivan a tomar una decisión?
Es necesario que aprendamos
a controlar nuestra boca o nuestra lengua antes de asumir un compromiso con
Dios o con los demás.
Cuando José acuso a sus
hermanos de haberse cogido la copa ellos los hermanos de José hicieron un
compromiso delante de él. V 9 “Aquel de tus siervos en quien fuere hallada la copa, que
muera, y aun nosotros seremos siervos de mi señor.”
Ellos estaban seguros de que
nada malo iba a pasar total nada que no sea suyo habían tomado. V 11 “Ellos entonces se dieron
prisa, y derribando cada uno su costal en tierra, abrió cada cual el costal
suyo.”
Oh sorpresa las cosas no
salieron como ellos creían, la copa si estaba en el costal de benjamín el
hermano menor que tenían que cuidar. V 12 “Y buscó; desde el mayor comenzó, y
acabó en el menor; y la copa fue hallada en el costal de Benjamín”
Así estemos seguros de lo
que hacemos o queremos siempre hay un margen de riesgo para lo cual tenemos que
estar preparados. Los proyectos comerciales deben tener un 10 % de margen de
riesgo, los proyectos militares deben tener un plan A y un plan B.
Hay cosas que no podemos
hacer y hay otras cosas que no debemos hacer, para poderlo saber es necesario
tener prudencia.
Este no es el primer caso de
imprudencia al tomar decisiones o hacer pactos llevado por las emociones. Jefte
tenía una confrontación y quería ganar. Para lograrlo hizo un pacto con Dios.
Jueces 11: 30-31 “Y
Jefté hizo voto a Jehová, diciendo: Si entregares a los amonitas en mis
manos, 11:31 cualquiera que saliere de las puertas de mi casa a
recibirme, cuando regrese victorioso de los amonitas, será de Jehová, y lo
ofreceré en holocausto”
Lo que Jefté no sabía era lo
que iba a suceder. V 34 “Entonces volvió Jefté a Mizpa, a su casa; y he aquí su hija
que salía a recibirle con panderos y danzas, y ella era sola, su hija única; no
tenía fuera de ella hijo ni hija.”
El tomar esta decisión o
hacer este pacto de manera apresurada le causo mucho dolor. V 35 “Y cuando él la vio,
rompió sus vestidos, diciendo: ¡Ay, hija mía! en verdad me has abatido, y tú
misma has venido a ser causa de mi dolor; porque le he dado palabra a Jehová, y
no podré retractarme.”
La vida o la muerte están en
nuestra lengua ten cuidado de lo que hablas. Proverbios 18: 21 “La muerte y la vida están
en poder de la lengua, Y el que la ama comerá de sus frutos.”
De lo que sale de nuestra
boca es lo que vamos a vivir. No dejes que tu boca te condene. Proverbios 13: 2
“Del
fruto de su boca el hombre comerá el bien; Mas el alma de los
prevaricadores hallará el mal. 13:3 El
que guarda su boca guarda su alma; Mas el que mucho abre sus labios
tendrá calamidad.”
Si queremos que de nuestra
boca salgan palabras de bendición y sobre todo compromisos importantes es
necesario que limpiemos nuestro corazón saca de él todo lo que lo contamina.
Orgullo, vanagloria, temores. Etc. Lucas 6: 45 “El
hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo bueno; y el hombre malo,
del mal tesoro de su corazón saca lo malo; porque de la abundancia del corazón
habla la boca.”
La boca del que no piensa
antes de hablar siempre lo lleva de calamidad en calamidad, no dejes que las
circunstancias te hagan perder el control de tu lengua. Proverbios 18: 6-7 “Los labios del necio
traen contienda; Y su boca los azotes llama. 18:7 La
boca del necio es quebrantamiento para sí, Y sus labios son lazos para su
alma.”
Es nuestra boca la que determina nuestra forma
de vida los demás nos ven de acuerdo a lo que nos oyen hablar. Mateo 12: 36-37
“El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca
buenas cosas; y el hombre malo, del mal tesoro saca malas cosas. 12:36 Más yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de
ella darán cuenta en el día del juicio. 12:37 Porque
por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado.”
Si no sabes
controlar tu lengua pídele que te ayude al que todo lo puede al que puede
devolverle la vista a los ciegos a Jesucristo todo poderoso.