Cuando nosotros escuchamos sobre
protección familiar por lo general nos imaginamos un buen sistema de seguro
para cuando los padres ya no estemos.
Muchos relacionamos protección
familiar con un buen sistema de ahorros que nos permita vivir bien en momentos
de crisis o un plan de ahorros que les permita a nuestros hijos vivir muy bien
económicamente cuando ellos ya crezcan y nosotros los padres no podamos estar.
Jesús
también tenía que partir y le preocupaba el futuro de sus discípulos. V 12 “Cuando estaba con
ellos en el mundo, yo los guardaba en tu nombre; a los que me diste, yo los
guardé, y ninguno de ellos se perdió, sino el hijo de perdición, para que la
Escritura se cumpliese.”
Como Proteger Nuestra Familia.
1. Entregándoselos a Jehová. V 11 “Y ya no estoy en el mundo;
mas éstos están en el mundo, y yo voy a ti. Padre santo, a los que me has dado,
guárdalos en tu nombre, para que sean uno, así como nosotros.” nosotros
no podemos estar en todo lugar con nuestros hijos pero Jehová si, él los puede
acompañar en cualquier lugar del mundo.
2. No pretendiendo esconderlos del
mundo. V 15 “No ruego que los quites del mundo, sino que los guardes del mal.” la mejor
forma de proteger a nuestra familia no es metiéndolos en una burbuja de
cristal. La mejor manera de protegerlos es entrenándolos y preparándolos para
luchar en este mundo.
El rey David era agradecido con Jehová
porque más que darle todo o evitarle las guerras lo entreno para salir victorioso en ellas. Salmos 144: 1 “Bendito sea Jehová, mi
roca, Quien adiestra mis manos para la batalla, Y mis dedos para la guerra;”
3. Inculcándoles desde muy pequeños
la palabra de Dios. V 17 “Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad.” la
palabra de Dios tiene el poder de corregir nuestro caminar solo la verdad de la
palabra nos puede guiar por el sendero correcto.
Que nuestros hijos comiscan las verdades
de Jesucristo es nuestra responsabilidad como padres. Deuteronomio 6: 7 “y las repetirás a tus
hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al
acostarte, y cuando te levantes.”
4. Delegándoles responsabilidades.
V 18 “Como tú me enviaste al mundo, así yo los he enviado al mundo.” solo
cuando nuestros hijos participan de lo que hacemos llegan a amar y a cuidar nuestro
trabajo.
5. Enseñándoles a trabajar en
equipo. V 21 “para que todos sean uno;
como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros;
para que el mundo crea que tú me enviaste.” Los miembros de toda familia debe
entender que son un solo cuerpo, lo que le pasa a uno lo sienten todos. 1 Corintios 12: 25- 26 “para que no haya
desavenencia en el cuerpo, sino que los miembros todos se preocupen los unos
por los otros. De manera que si un miembro padece, todos los miembros se duelen
con él, y si un miembro recibe honra, todos los miembros con él se gozan.”
6. Enseñándoles el valor de la
Familia. V 9-10 “Yo ruego por ellos; no ruego por el mundo, sino por los que me diste;
porque tuyos son, y todo lo mío es tuyo, y lo tuyo mío; y he sido glorificado
en ellos.” el deseo de Jesús es que todo el mundo se salve pero
primero estaban los suyos. Las demás personas pueden aprovecharte mientras estas
bien pero los único que te pueden soportar cuando estas mal son los de tu
familia.
7. Enseñándoles a valorar a todos
aquellos que comparten nuestra visión y tienen nuestro mismo propósito. V 20 “Mas no ruego solamente por
éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos,”
La protección familiar es
fundamental y es algo en lo cual tenemos que trabajar. Recuerda que una cosa es
sobreproteger y otra muy diferente sobreproteger. La sobreprotección genera
mediocridad la protección formación y preparación para el futuro.