A la mayoría de los seres humanos
nos gusta vivir bien y si no lo podemos
lograr nos gusta fingir que vivimos bien. Por lo general queremos hacernos ver
como importantes. V 7- 8 “Observando cómo escogían los primeros asientos a la mesa, refirió a
los convidados una parábola, diciéndoles: Cuando fueres convidado por alguno a
bodas, no te sientes en el primer lugar, no sea que otro más distinguido que tú
esté convidado por él,” no es malo que te sientas importante lo malo es
cuando te sientes inferior y tratas de mostrar que eres importante. Tu por ser
hijo o hija de Dios eres importante no necesitas opacar a otros o pasar por encima
de los demás para sentirte importante.
No basta
con que te creas importante debes ser importante.
Como ser Importante.
1. Siendo Humilde. Una persona que
es importante no necesita decir que lo es, su actitud humilde lo hace ver
importante. V 10 “Mas cuando fueres convidado, ve y siéntate en el último lugar, para
que cuando venga el que te convidó, te diga: Amigo, sube más arriba; entonces
tendrás gloria delante de los que se sientan contigo a la mesa.”
2. Desechando toda Arrogancia. Una
persona arrogante en lugar de parecer importante se ve como alguien sin ninguna
importancia. V 11 “Porque cualquiera que se enaltece, será humillado; y el que se
humilla, será enaltecido.”
3. No buscando recompensa por lo
que haces. V 12 “Dijo también al que le había convidado: Cuando hagas comida o cena,
no llames a tus amigos, ni a tus hermanos, ni a tus parientes, ni a vecinos
ricos; no sea que ellos a su vez te vuelvan a convidar, y seas recompensado.” una
persona importante no hace las cosas para que los vean.
3. No hagas acepción de personas. V
13 “Mas cuando hagas
banquete, llama a los pobres, los mancos, los cojos y los ciegos;” una
persona importante siempre ve a todos los demás como personas importantes.
4. Creyendo que lo que hacemos por
los demás es Cristo quien nos recompensa. V 14 “y serás bienaventurado; porque ellos no te pueden recompensar, pero
te será recompensado en la resurrección de los justos.”
5. Teniendo tiempo para los demás.
Muchas veces dejamos que nuestras ocupaciones nos alejen de quienes nos aman. V
18- 20 “Y todos a una comenzaron a excusarse. El primero dijo: He comprado
una hacienda, y necesito ir a verla; te ruego que me excuses. Otro dijo: He
comprado cinco yuntas de bueyes, y voy a probarlos; te ruego que me excuses. Y
otro dijo: Acabo de casarme, y por tanto no puedo ir.”
No son las cosas las que nos hacen
importantes son nuestros actos. Nuestra actitud puede hacernos importantes para
los demás o pueden hacernos insoportables.
6. Estando dispuestos a pagar un
precio por lo que queremos. V 26 “Si alguno viene a mí, y no aborrece a su padre, y madre, y mujer, e
hijos, y hermanos, y hermanas, y aun también su propia vida, no puede ser mi
discípulo.” en lo espiritual seguir a Jesús es mucho más que tan solo
hacer una oración de fe. La oración de fe no es más que la confirmación de
nuestra decisión. Son nuestros actos frente a Jesús que determinan si somos sus
discípulos o no.
7. Saber manejar nuestros
sufrimientos. V 27 “Y el que no lleva su cruz y viene en pos de mí, no puede ser mi
discípulo.” una persona importante no es aquella que no tiene
sufrimientos. Una persona importante es aquella que de sus sufrimientos hace
oportunidades para aprender y avanzar.
8. Planificando nuestras
actividades. V 28- 29 “Porque ¿quién de vosotros, queriendo edificar una torre, no se
sienta primero y calcula los gastos, a ver si tiene lo que necesita para
acabarla? No sea que después que haya puesto el cimiento, y no pueda acabarla,
todos los que lo vean comiencen a hacer burla de él,” una
persona importante no es una persona de casualidades sino de propósitos.
10. Sirve de Corazón. V 34-35 “Buena es la sal; más si la
sal se hiciere insípida, ¿con qué se sazonará? Ni para la tierra ni para el
muladar es útil; la arrojan fuera. El que tiene oídos para oír, oiga” una
persona que no sirve es como la sal insípida deja de ser importante y útil
Tú no eres importante por lo que
tienes tú haces importantes a las cosas que tienes. Tu actitud vale más que lo
que puedes tener. Los bienes se pueden acabar tus actos pueden permanecer para
siempre.