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A todos los seres humanos nos gusta sobresalir, sentirnos importantes y que lo que hacemos sea valorado por todo el mundo.
Es tanto esta obsesión que cuando hacemos algo y los demás no nos aplauden o no nos muestran su agradecimiento nos sentimos mal y ofendidos tanto que decimos no volver hacer algo para los demás.
El orgullo y el creerse más que los demás no es lo mejor que podemos hacer para prosperar.
Como no caer en la arrogancia.
1. Reconoce que lo que tenemos o hacemos es gracias a Dios y a las personas que él pone en nuestro camino para que nos ayuden. V 13 “Porque dijo: Con el poder de mi mano lo he hecho, y con mi sabiduría, porque he sido prudente; quité los territorios de los pueblos, y saqueé sus tesoros, y derribé como valientes a los que estaban sentados;”
2. No te creas mejor que Dios o que los que te ayudan. V 15 “¿Se gloriará el hacha contra el que con ella corta? ¿Se ensoberbecerá la sierra contra el que la mueve? ¡Como si el báculo levantase al que lo levanta; como si levantase la vara al que no es leño!” esto hará que te vuelvas orgulloso e insoportable.
3. No hagas las cosas para que te vean. Mateo 6: 1 “Guardaos de hacer vuestra justicia delante de los hombres, para ser vistos de ellos; de otra manera no tendréis recompensa de vuestro Padre que está en los cielos.”
4. Haz las cosas como para Dios. Colosenses 3: 23 “Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres” de esta forma las haremos bien o perfectas.
5. Haz las cosas con amor. Gálatas 5: 13 “Porque vosotros, hermanos, a libertad fuisteis llamados; solamente que no uséis la libertad como ocasión para la carne, sino servíos por amor los unos a los otros” si hacemos las cosas con amor las podemos disfrutar y nunca nos vamos a cargar por lo que hacemos.
Consecuencias de la arrogancia.
1. Recibirá castigo de parte de Dios y de los hombres. V 12 “Pero acontecerá que después que el Señor haya acabado toda su obra en el monte de Sion y en Jerusalén, castigará el fruto de la soberbia del corazón del rey de Asiria, y la gloria de la altivez de sus ojos.”
2. Se quedara solo a tal punto que se sentirá sin fuerzas y sin ganas de seguir. V 16 “Por esto el Señor, Jehová de los ejércitos, enviará debilidad sobre sus robustos, y debajo de su gloria encenderá una hoguera como ardor de fuego”
3. Provocara la ruina. V 18-19 “La gloria de su bosque y de su campo fértil consumirá totalmente, alma y cuerpo, y vendrá a ser como abanderado en derrota. Y los árboles que queden en su bosque serán en número que un niño los pueda contar” la ruina no necesariamente es quedarse sin bienes materiales. Hay gente que lo tiene todo pero su vida es una ruina total. No pueden disfrutar todo lo que tienen.
Beneficios de la humildad.
1. Tiene la gracia de Dios. Es decir todas las personas lo aman y quieren estar con él. Santiago 4: 6 “Pero él da mayor gracia. Por esto dice: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes.” proverbios 3: 34 “Ciertamente él escarnecerá a los escarnecedores, Y a los humildes dará gracia.”
2. Dios lo consuela a través de otras personas. Una persona humilde nunca se sentirá sola. 2 Corintios 7: 6 “Pero Dios, que consuela a los humildes, nos consoló con la venida de Tito”
3. Se obtiene sabiduría. Proverbios 11: 2 “Cuando viene la soberbia, viene también la deshonra; Mas con los humildes está la sabiduría.” los arrogantes creen saberlo todo y es por eso que se estancas y por lo general van en retroceso.
4. Tendrán la ayuda de Dios y de los demás. Salmos 22: 26 “Comerán los humildes, y serán saciados; Alabarán a Jehová los que le buscan; Vivirá vuestro corazón para siempre.”
Una persona soberbia o altiva por lo general es desagradable para todo el mundo la gente está con ellos solo porque les toca pero en cuanto pueden se cansan y los dejan solos. Nunca te creas más que los demás. ¡Recuerda el éxito no se lo puede conseguir estando solos!
