Jehová es un Dios de resultados por
lo tanto exige a sus siervos frutos y el que no da frutos es desechado. Mateo
3: 10 “Y ya también el hacha está puesta a la raíz de los árboles; por
tanto, todo árbol que no da buen fruto es cortado y echado en el fuego.”
Todo aquel que no produce es
abominable delante de Jesús. Mateo 25:25-26 “por lo cual tuve miedo, y fui y escondí tu talento en la tierra;
aquí tienes lo que es tuyo. Respondiendo su señor, le dijo: Siervo malo y
negligente, sabías que siego donde no sembré, y que recojo donde no esparcí.”
En la vida espiritual o en la vida
secular es muy importante el dar frutos todo aquel que no produce está
destinado a vivir en pobreza.
La
única forma de crecer, desarrollarse y prosperar en cualquier área de nuestra
vida es dejando de ser inútil.
Jesucristo quiere darnos las pautas
para tener una vida de éxito en lo espiritual y en lo secular. V 8 “Porque si estas cosas están
en vosotros, y abundan, no os dejarán estar ociosos ni sin fruto en cuanto al
conocimiento de nuestro Señor Jesucristo.”
El no tener estas cosas que Dios
nos enseña nos convierte en inútiles. V 9 “Pero el que no tiene estas cosas tiene la vista muy corta; es
ciego, habiendo olvidado la purificación de sus antiguos pecados.”
Veamos que son esas cosas que nos permiten tener una vida productiva.
1. Siendo Diligentes. V 5 a “vosotros también, poniendo
toda diligencia por esto mismo” para conseguir algo importante en la vida se
requiere mucho más que tan solo esforzarse, para conseguir cosas importantes se
necesita hacerlas en el momento oportuno de nada sirve hacer algo muy bien si
ya nadie la necesita.
2. Siendo Virtuosos. V 5 b “añadid a vuestra fe virtud;” solo
cuando hacemos las cosas aplicándoles todos los valores generan frutos que permanecen.
3. Teniendo Conocimiento. V 5 c “a la virtud, conocimiento;” el
conocimiento es la base principal en el logro de todo propósito. El que no sabe
que es lo que quiere o como conseguirlo nunca podrá triunfar.
4. Dominio Propio. V 6 a “al conocimiento, dominio
propio;” las personas que no pueden dominar sus emociones terminan
siendo esclavas de ellas. Las emociones por lo general nos hacen tomar malas decisiones.
5. Paciencia. V 6 b “al dominio propio,
paciencia; a la paciencia” solo el saber esperar en paz hace que tengamos la
tranquilidad suficiente que nos permite hacer las cosas bien. La ansiedad es
muy mala consejera.
6. Piedad. V 6 c “, piedad” de nada
sirve hacer las cosas bien si no se las hace pensando en los demás. El egoísmo impide
que una persona de buenos frutos.
7. Afecto Fraternal. V 7 a “a la piedad, afecto
fraternal;” el afecto por los demás es lo que nos estimula y nos
impulsa a luchar sin cansarnos para conseguir un propósito.
8. Amor. V 7 b “y al afecto fraternal,
amor.” Cuando amamos lo que hacemos nos queda bien, lo disfrutamos y sobre
todo generamos buenos frutos.
9. Recordando siempre estas cosas así
creamos que ya nos la sabemos. V 12 “Por esto, yo no dejaré de recordaros siempre estas cosas, aunque
vosotros las sepáis, y estéis confirmados en la verdad presente.”
La clave para que algo se fije en
nuestra mente y en nuestro corazón es la repetición, si quieres que el
conocimiento que tienes de fruto nunca dejes de repetir lo que tienes que
hacer.
Una vida sin frutos es una vida estéril.
El ocio y la pereza son la base fundamental para tener una vida de fracaso. Esfuérzate
se valiente nunca te sueltes de la mano de Jesucristo y serás una persona
fructífera en todo.