sábado, 25 de febrero de 2017

Conociendo a los Demás. Deuteronomio 33

Resultado de imagen para conoce a los demasConocer a los demás es sumamente importante, del conocimiento que tengamos de los demás depende que logremos lo que queremos o que fallemos al intentarlo.
Conocer a los demás te permite identificar ante quien estas, saber cómo piensa, siente, actúa y reacciona esa persona. Esto te permite ‘hablarle en su idioma’. ¿Qué significa esto? Significa que te conduces ante ella de manera apropiada hablándole en los términos que a ella le gusta y con los que se siente cómodo
Para que podamos aplicar el arte de conocer a los demás es necesario primero conocernos a nosotros mismos, si nos conocemos nosotros nos es más fácil conocer a los que están a nuestro alrededor.
Jacob tenía una bendición para cada uno de sus hijos. V 7- 8 “Y esta bendición profirió para Judá. Dijo así: Oye, oh Jehová, la voz de Judá,  Y llévalo a su pueblo;  Sus manos le basten,  Y tú seas su ayuda contra sus enemigos.  33:8 A Leví dijo: Tu Tumim y tu Urim sean para tu varón piadoso,  A quien probaste en Masah, Con quien contendiste en las aguas de Meriba,
Para poder hacer este tipo de bendición es necesario conocer muy bien a los demás en especial a la persona a quien vamos a bendecir.
Moisés antes de morir Bendijo al pueblo de Israel tribu por tribu esto es lo que nos relata el capítulo 33. V 1 “Esta es la bendición con la cual bendijo Moisés varón de Dios a los hijos de Israel, antes que muriese.
El conocer bien a los demás brinda muchas ventajas.
1. Podemos delegar con mayor facilidad. De acuerdo a la habilidad o don de cada persona. Éxodo 18: 25 - 26 “Escogió Moisés varones de virtud de entre todo Israel, y los puso por jefes sobre el pueblo, sobre mil, sobre ciento, sobre cincuenta, y sobre diez.  18:26 Y juzgaban al pueblo en todo tiempo; el asunto difícil lo traían a Moisés, y ellos juzgaban todo asunto pequeño.
2. Mayor productividad, si cada persona trabaja en lo que sabe hacer las cosas le van a quedar bien y por lo tanto aumentara su productividad. Jesucristo exige que demos abundante fruto. Mateo 25: 25-26 “por lo cual tuve miedo, y fui y escondí tu talento en la tierra; aquí tienes lo que es tuyo.  25:26 Respondiendo su señor, le dijo: Siervo malo y negligente, sabías que siego donde no sembré, y que recojo donde no esparcí.
3. Mayor Gozo. El trabajar en lo que nos gusta produce gozo. Y el hacer las cosas con gozo hace que nos quede bien. 1 tesalonicenses 2: 20 “Vosotros sois nuestra gloria y gozo.
4. Trabajar en equipo. Cuando sabemos que es lo que cada miembro puede hacer o en que se desempeña mejor podemos aportar cada uno con nuestro don. El éxito no está en que todos hagamos lo mismo, el éxito está en que todos seamos complemento de los demás. Génesis 2: 18 “Y dijo Jehová Dios: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él.
5. Podemos brindarnos amor. Nadie se enamora de alguien a quien no conoce. La única forma de enamorarnos de Jesucristo o de cualquier otra persona es conociéndola.
6. Podemos brindar ayuda de manera eficaz y oportuna.
Hoy en día los tiempos son difíciles y por asuntos de trabajo o de estudio ya no se dispone de mucho tiempo para bendecir a cada uno de manera particular y de manera extensa todos los días. Por eso podemos hacer uso del altar familiar para una vez en semana reunirnos todos en familia. Bendecir los padres a los hijos. Exponer nuestras necesidades para orar por ellas.
El altar familiar sirve para orar, estudiar la palabra de Dios juntos y sobre todo es un espacio importante en el cual nos conocemos de los unos a los otros.