miércoles, 9 de noviembre de 2016

Los Sabores de la Vida. Éxodo 15.


Para cada uno de nosotros la vida tiene un sabor diferente dependiendo de las circunstancias que estemos pasando.
Lo importante que debemos entender es que los sabores de la vida son variados pueden ser dulces o amargos, es inevitable que tengamos que saborear cada uno de esos sabores. Dios acababa de hacer libre a su pueblo los cuatrocientos años de esclavitud podríamos decir que eran sabores amargos pero dado a que ellos ya estaban acostumbrados esos sabores amargos para ellos posiblemente ya eran dulces. 

Cuando Dios  desacomodo permitiendo que  los egipcios les impusieran duras cargas volvieron a sentir el sabor amargo de la vida.
Dios los hizo libres y al ver como el mar se abrió y los libero volvieron a experimentar lo dulce de la vida tanto que les dio deseos de cantar para Jehová. 15: 1 “Entonces cantó Moisés y los hijos de Israel este cántico a Jehová, y dijeron: Cantaré yo a Jehová, porque se ha magnificado grandemente;  Ha echado en el mar al caballo y al jinete.
La verdad es que los israelitas no se cambiaban por nadie eran los grandes adoradores de Jehová. V 10- 11 “Soplaste con tu viento; los cubrió el mar;  Se hundieron como plomo en las impetuosas aguas. ¿Quién como tú, oh Jehová, entre los dioses?  ¿Quién como tú, magnífico en santidad,  Terrible en maravillosas hazañas, hacedor de prodigios?
Esta misma experiencia la sentimos muchos de nosotros cuando vemos que las cosas salen como esperábamos y que Jehová nos complace en todo. En el culto gritamos quien vive… aleluya. Etc.
Pero lo que los Israelitas no sabían es que Jehová los quería preparar para que fueran un pueblo poderoso y para lograrlo debía hacerlos pasar de lo dulce a lo amargo y de lo amargo a lo dulce.
Como se prepara a un Pueblo poderoso.
1. Experimentando el desierto o los momentos de escases. V 22 “E hizo Moisés que partiese Israel del Mar Rojo, y salieron al desierto de Shur; y anduvieron tres días por el desierto sin hallar agua.” acababan de ver las maravillas de Dios y ahora estaban aguantando sed.
2. Aprendiendo a soportar la presión. V 23 “Y llegaron a Mara, y no pudieron beber las aguas de Mara, porque eran amargas; por eso le pusieron el nombre de Mara.” estaban con sed y para completar ahora el agua que encontraron era amarga. Parecía que las cosas iban de mal en peor,
3. Obligándolo a ser recursivo. V 24 “Entonces el pueblo murmuró contra Moisés, y dijo: ¿Qué hemos de beber?” el pueblo podía hacer pozos al igual que muchos pueblos lo hacían. Génesis 26: 18 “volvió a abrir Isaac los pozos de agua que habían abierto en los días de Abraham su padre, y que los filisteos habían cegado después de la muerte de Abraham; y los llamó por los nombres que su padre los había llamado.” pero en lugar de hacer algo lo único que hicieron fue murmurar.
4. Probando la capacidad de Actuar. V 25 “Y Moisés clamó a Jehová, y Jehová le mostró un árbol; y lo echó en las aguas, y las aguas se endulzaron. Allí les dio estatutos y ordenanzas, y allí los probó” el verdadero líder es el que sabe encontrar orden en medio del caos.
5. Pasándolo de lo amargo a lo dulce para aprender a valorar lo que tenemos. V 27 “Y llegaron a Elim, donde había doce fuentes de aguas, y setenta palmeras; y acamparon allí junto a las aguas.
Nosotros le damos sabor a nuestra vida cuando aprendemos a disfrutar cualquiera que sea nuestra situación. Filipenses 4: 12 “Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad.
Este mundo está compuesto por infinidad de sabores pero la verdad es que Dios nos capacita para que seamos nosotros los que le demos sabor a nuestra vida tu decides como vivir de manera dulce o amargada.